Los servicios de habilitación preparan a los niños con autismo para vivir de manera más independiente en sus comunidades mediante el aprendizaje y el desarrollo de nuevas habilidades, habilidades y comportamientos. Las áreas comunes de formación incluyen el cuidado personal y la higiene, la comunicación, la socialización, la seguridad, la expresión física y emocional, las habilidades preprofesionales, las actividades de ocio, la resolución de problemas y la gestión del hogar.

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Con los servicios de habilitación, los niños con autismo aprenden habilidades sociales y, cuando es posible, las habilidades para vivir de forma independiente. Los proveedores de servicios de habilitación ayudan a fomentar la inclusión comunitaria, las relaciones, la autodefensa y la elección informada al trabajar uno a uno con cada cliente en función de las metas y los resultados deseados establecidos por el padre individual o el equipo de terapia pediátrica del niño. Los padres y tutores pueden recibir capacitación para brindar habilitación a sus hijos adultos.

Algunos servicios de habilitación pueden incluir apoyo para la colocación laboral para que los hijos adultos con autismo estén activos dentro de su comunidad mientras obtienen sus propios ingresos. Ambos crearán un mayor nivel de autoconocimiento y satisfacción en la vida.